Detrás del volante
24/1/2024
Viajar es todo un placer, pero hay ocasiones en las que la carretera puede hacerse muy larga. Amenizamos tu viaje con ideas de entretenimiento para todas las edades que harán que los kilómetros pasen en un instante.
No hay nada como un viaje por carretera para despertar nuestro sentido más aventurero. Lo saben muy bien los que de verdad disfrutan con la conducción, que entienden que lo mejor no está en el destino, sino en el trayecto.
Conducir un Renault Espace E-Tech full hybrid, especialmente recomendado para los viajes por su comodidad y capacidad para toda la familia; o modelos perfectos para la camperización, como el Renault Kangoo Furgón E-Tech 100% eléctrico que también nos permiten pernoctar, harán que el viaje sea todavía más placentero.
Pero en los viajes largos, no solo es necesaria la predisposición y un buen vehículo, necesitamos amenizar los trayectos para que especialmente los peques no se aburran. Afortunadamente, vivimos en la era del entretenimiento y contamos con muchas alternativas -analógicas y digitales- para hacer que la ruta sea mucho más llevadera. Quédate con estas ideas para tu próxima escapada en coche.
Es cierto que hay personas que necesitan conducir en silencio, pero por regla general no hay nada como una buena lista de reproducción para hacer que los kilómetros pasen desapercibidos. Lo bueno es que la tecnología openR link de Renault viene con Google integrado, lo que nos da acceso a multitud de aplicaciones, tanto en Google Play o en Android Auto, muy prácticas para reproducir nuestros temas favoritos.
Tampoco es mala idea hacer que los niños nos ayuden a crear la playlist ideal antes de salir de viaje, porque de esta manera nos aseguramos de que escucharán las canciones que más les motivan. No obstante, siempre podemos recurrir a las listas ‘para conducir’ que otros usuarios han creado en plataformas como Spotify. O, simplemente, dejar que la magia ocurra con las bandas sonoras de road movies de todos los tiempos, como Thelma & Louise, Priscilla, reina del desierto, Hacia rutas salvajes o Pequeña Miss Sunshine.
Disponible en openR link, SongPop for Renault promete regalarnos instantes de lo más divertidos en carretera, sea cual sea nuestra edad. Se trata de un juego de preguntas sobre música que podemos usar tanto en solitario como en grupo. Nos permite responder por voz, lo que evita cualquier tipo de distracción para el conductor, y es perfecta para pasar instantes en familia o con amigos porque nos invita a adivinar infinidad de canciones.
De hecho, su catálogo incluye más de 120.000 tracks de todos los géneros y épocas, a las que podremos acceder a medida que avancemos a través de sus niveles. Además, si jugamos con otras personas, tenemos multitud de personajes entre los que elegir, que además están basados en iconos de la música como Madonna, David Bowie o The Kiss. Sin duda, una forma de hacer mucho más memorables los trayectos y de incentivar el conocimiento musical entre los más pequeños de la casa.
¿Quién no ha jugado alguna vez a memorizar capitales o identificar ríos? Es un método infalible para hacer que los niños repasen sus lecciones de geografía fuera de las aulas, pero también es una actividad para retar el conocimiento de los adultos.
Con la excusa de recorrer diferentes puntos del país en carretera, podemos preparar algunas preguntas sencillas para responder al momento. No solo sobre capitales o ríos, sino también sobre parques nacionales, edificios emblemáticos o, por ejemplo, sobre platos típicos de la zona.
Para ilustrar la experiencia podemos llevar con nosotros libros infantiles como el famoso Atlas del mundo, de Aleksandra Mizielinska y Daniel Mizielinski, todo un imprescindible para descubrir las curiosidades y maravillas del planeta en clave ilustrada. Pero si buscamos algo más localizado, nada como el Atlas de España de Joaquín Arias Pereira y Alejandra Fernández Mingorance, una edición de Lonely Planet que presenta el lado más asombroso de nuestro país con un lenguaje dirigido a los niños.
Los juegos de conocimiento como el Trivial han sabido adaptarse muy bien a los formatos transportables, de forma que en cualquier tienda especializada podemos encontrar versiones del juego compactas y con tarjetas. En este caso podemos jugar por equipos: por ejemplo, los de la parte de delante del coche contra los de la parte de atrás. De esta manera, el conductor podrá tener un cómplice que se encargue de leer las preguntas por él.
También es muy interesante para un viaje con amigos, sobre todo porque incluye preguntas de todos los campos de conocimiento. Es más, hoy en día también se pueden adquirir juegos muy similares especializados en temáticas, como series, la saga Harry Potter, ciencia o gramática.
En la era de los dispositivos digitales es fácil que los niños caigan rendidos ante las tablets y las videoconsolas. Sin embargo, la exposición a las pantallas durante mucho tiempo y a temprana edad no es muy recomendable, por lo que es mejor alternar el entretenimiento con propuestas analógicas. Por ejemplo, con tiempo destinado a dibujar o con actividades que desaten su creatividad.
También es muy divertido hacer una checklist en torno a la ruta para fomentar más la observación. En ella incluiremos cosas que los niños (y los adultos) deben encontrar a lo largo del viaje para poder tacharlas. Por ejemplo, un lago, un coche amarillo, una matrícula completamente impar, un animal que vuele, una montaña o un punto de recarga para nuestro vehículo. Verás cómo se lo pasan en grande compitiendo por ver quién rellena más rápido la lista.
El audio se ha convertido en una de las fuentes de entretenimiento más afianzadas. La oferta actual de podcasts es tan grande que nos resultará muy difícil aburrirnos durante el trayecto. En las plataformas más conocidas encontraremos programas sobre divulgación, entrevistas, humor, series de televisión o true crime, entre muchos otros. Es más, los podemos reproducir fácilmente desde nuestro smartphone gracias al sistema openR link de Renault.
Pero si lo que echamos en falta son las buenas historias y la conducción no nos deja tiempo para la novela que estamos leyendo, otra buena alternativa son los audiolibros. Muchos de los títulos más actuales tienen producciones tan cuidadas que nos permiten experimentar la trama como si la viviésemos desde dentro. Y si, por el contrario, somos más de ensayo, este formato en audio también nos ayudará a mantenernos mucho más concentrados y aprender a la vez que viajamos.
Si algo ya funciona, ¿para qué cambiarlo? Por mucho que pase el tiempo y que avancen las generaciones, hay clásicos que son atemporales. Por ejemplo, los juegos magnéticos como el parchís o el juego de la oca, que hoy en día también podemos encontrar en versión digital para la tablet. O quizás nos apetezca hacer una ronda de Veo Veo y jugar a que los niños adivinen qué estamos observando durante el trayecto.
Otra opción que gusta mucho es el juego de los personajes, en el que cada persona porta un post-it en la frente con un nombre célebre. Tendrá que hacer preguntas al resto de compañeros de viaje para averiguar quién es (y no vale mirarse al espejo retrovisor para saberlo). Aunque si queremos una alternativa algo más actualizada, podemos recurrir a juegos para smartphone como el Heads Up, que va por turnos y que sirve también para adivinar acentos, títulos de películas, animales y mucho más.