tecnología eléctrica y componentes del motor eléctrico
El motor de un coche eléctrico, sin cilindro ni pistón y sin gases de escape, está construido a partir de un conjunto de piezas diseñadas para convertir la electricidad en energía mecánica.
El motor utiliza una corriente para generar un campo magnético en la parte fija de la máquina (estator) que, al desplazarse, pone en movimiento una pieza giratoria (rotor) e impulsa las ruedas del vehículo.
Renault adapta esta tecnología desde hace más de 10 años a los desafíos de la movilidad de hoy y del mañana, apostando por la experiencia y la fabricación francesa.
Descubre a continuación los componentes de un coche eléctrico.
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la plataforma CMF-EV de Renault Megane E-Tech eléctrico
Esta plataforma CMF-EV alberga una batería ultraplana de 60 kWh y un motor eléctrico compacto de 160 kW. Su distribución de peso optimizada, su batalla alargada, su suelo totalmente plano y su centro de gravedad muy bajo potencian su agilidad y aumentan el espacio disponible a bordo.
¿cuáles son sus ventajas?
Renault E-Tech eléctrico es una tecnología innovadora que ofrece una experiencia de conducción única e intuitiva.
la visión Renault del mañana
Renault trabaja en las mejoras del rendimiento de nuestros motores eléctricos. Queremos lograr que sean más eficaces para reducir el consumo y, por tanto, aumentar la autonomía.
También hemos previsto intensificar la producción en las fábricas francesas de Douai y Cléon.
La principal diferencia entre un coche eléctrico y uno híbrido radica en la motorización y las baterías.
Un coche eléctrico tiene un motor específico alimentado únicamente con la energía eléctrica de una batería.
Un vehículo híbrido tiene un motor térmico combinado con uno o dos motores eléctricos.
Sí. En realidad, los motores de los coches eléctricos actuales son tan potentes como los motores térmicos. También tienen una mayor capacidad de aceleración en el arranque y, por tanto, ofrecen reprises más rápidas y suaves.
No todos los coches eléctricos tienen la misma capacidad en términos de potencia; todo depende del tamaño del motor y de la capacidad de la batería. La potencia depende de los rendimientos específicos de cada modelo de vehículo eléctrico.
La principal particularidad de un coche eléctrico es su motor.
Se trata de un motor eléctrico y no térmico, por lo que no se alimenta de gasolina ni de gasóleo, sino de la electricidad procedente de una batería situada en el interior del vehículo.
Su potencia y autonomía varían según el modelo, por ejemplo, el Renault Megane E-Tech eléctrico puede llegar hasta los 220 CV y tiene una autonomía de hasta 470 km (estándar WLTP).
Otras particularidades relevantes:
En términos de fiabilidad, los vehículos eléctricos no tienen nada que envidiar a los térmicos.
Basándose en su experiencia en vehículos eléctricos y en Fórmula 1 y apoyándose en equipos de ingeniería, desarrollo y control, Renault ha desarrollado la tecnología E-Tech para que sea lo más fiable posible:
Los motores eléctricos son menos complejos y requieren menos piezas y por lo tanto menos mantenimiento. Por ello, un problema será más fácil de tratar y reparar que en un vehículo térmico.
Sus componentes son tan sólidos y resistentes como los de los vehículos térmicos y ya se han formado más de 30.000 empleados, en la red Renault, para ayudarte en el mantenimiento de tu vehículo E-Tech eléctrico.
Los vehículos equipados con la tecnología E-Tech eléctrico que ofrecemos hoy son el fruto de años de trabajo que han demostrado su valía desde que lo hizo Zoe en 2012. Estamos orgullosos de poder decir que nuestra experiencia eléctrica hace posible desarrollar nuevas tecnologías para ofrecer coches eléctricos cada vez más fiables.
En general, el mantenimiento de un coche eléctrico es entre un 25% y un 40% más barato que el de un vehículo de combustión interna. Por una simple razón: un motor eléctrico es más simple que un motor de combustión, ya que tiene muchas menos partes móviles. No es preciso operaciones de mantenimiento típicas de los motores de gasolina y diésel: no es necesario drenar el motor; mantener las correas de distribución... Y no hay necesidad de llevar a cabo controles anticontaminación.
En términos más generales, el motor de un automóvil eléctrico se desgasta menos rápidamente. Sin embargo, es necesario tener las piezas de desgaste revisadas: el estado de las pastillas de freno y los discos, como para un automóvil térmico, así como la presión de los neumáticos, la dirección, las suspensiones y, por supuesto, la batería, que suministra energía eléctrica al motor.
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