Trucos y Consejos
19/5/2025
Ya hemos visto en otras ocasiones que la seguridad se ha convertido en la mayor prioridad de los conductores. Una preocupación que se incrementa cuando nos acompañan nuestros seres queridos, y especialmente si llevamos niños o bebés. Los automóviles son cada vez más seguros, y los de última generación cuentan con sistemas realmente avanzados.
Pero hay un elemento fundamental para la seguridad de nuestros hijos que no depende tanto de la tecnología del vehículo, y sí de nuestros propios conocimientos y precauciones: los Sistemas de Retención Infantil. Y no solo la sillita en sí misma, sino todo el conjunto de sistemas, técnicas y buenas prácticas en torno a ella.
Tanto si eres padre o madre primerizo, como si ya cuentas con varios hijos de cierta edad, es normal que surjan dudas sobre cómo es la forma más segura de llevarlos en el coche. Y en cualquier caso, siempre hay cuestiones en las que no reparamos o no le damos la importancia suficiente, por lo que nunca está de más repasar las principales claves.
Probablemente ya lo estés haciendo y por eso has llegado hasta este artículo. En tu búsqueda, es probable que leas sobre muchos términos que puedan resultar confusos o redundantes, por lo que es mejor que los aclaremos cuanto antes.
“Sistemas de Retención Infantil” (SRI) es el nombre técnico que reciben las sillitas infantiles, incluidos los capazos, alzadores y otros sistemas. Puedes encontrar ambos términos usándose como sinónimos, aunque evidentemente el técnico es el más correcto.
El único estándar vigente actualmente en la Unión Europea es la norma ECE R129, que entró en vigor en 2013 y que también se la conoce como “i-Size”. Desde esa fecha ha estado coexistiendo con el estándar ECE R44, creado por la ONU en los años 80 y que desde septiembre de 2024 ya no es válido.
La norma R129 también recibe el nombre de “i-Size”, que hace referencia a la clasificación de grupos de sillitas por altura, y no por edad o peso como establecía la antigua norma. De hecho, la R129 establece que es obligatorio el uso de SRI por debajo del 1,35 metros de altura del niño, sea cual sea su edad.
Otro término que encontrarás mucho es el ISOFIX, que es el nombre que recibe el sistema de anclaje que tiene el vehículo para mantener sujeta la sillita. Todos los SRI con homologación i-Size son compatibles con este tipo de sistema, y aunque todos los coches actuales lo incluyen, no lo llevan en todos los asientos. Generalmente se indica con el logotipo de ISOFIX etiquetado en el asiento.
Una vez que tengamos claros todos los conceptos, podemos ir a revisar el mercado para comprar la sillita que mejor se ajuste a nuestras necesidades. Para hacerlo de forma correcta y no equivocarnos con la elección, hay una serie de claves que debemos tener en cuenta.
Nuestra recomendación es que apuestes siempre por marcas de SRI reconocidas y que compres en establecimientos oficiales o de confianza, donde además puedas ser asesorado por un experto.
En cuanto al modelo, los grupos de clasificación desaparecen con la norma i-Size, y los SRI pasan a categorizarse por rangos de altura, con el peso como medida secundaria. Tan solo tienes que elegir una sillita en cuyo rango se encuentre la altura de tu hijo.
Si eres propietario de un vehículo Renault, la marca cuenta con una serie de modelos de SRI recomendados, cuyas especificaciones se ajustan a las características de sus vehículos, aunque obviamente eso no excluye a otros modelos homologados.
Sí, siempre debes comprar SRI que estén debidamente homologados por la norma R129 i-Size. Esto lo puedes comprobar en la pegatina obligatoria de color naranja con el nombre de la norma que sigue, así como el número de homologación y de serie. También ahí puedes comprobar el rango de altura para el cual está indicado el modelo.
Como decíamos más arriba, desde septiembre de 2024 la norma R129 es la única homologación válida, estando prohibida la venta de SRI con la homologación anterior R44. No obstante, si cuentas con una sillita con dicha homologación, puedes seguir usándola si está en perfectas condiciones y fuera de su fecha de caducidad.
El niño o niña debe cambiar sí o sí de SRI cuando supere con su altura la cifra máxima del rango establecido en la etiqueta. Como orientación visual, su cabeza nunca debe sobresalir por encima del respaldo de la silla, y su peso debe estar dentro del límite establecido.
La anticipación tampoco es buena, y nunca cambiaremos a un SRI de rango superior si el niño no ha alcanzado la altura mínima mostrada en la etiqueta. Ten en cuenta que una silla demasiado grande no sujetará con total firmeza en caso de impacto.
Aunque existen sillas de coche multigrupo aptos para bebés, lo ideal para llevar al recién nacido en el coche es optar por un portabebés o capazo homologado. Según la norma i-Size, estos portabebés son aptos para una altura de 78-85 cm, lo que equivale a entre 9 y 15 meses de edad. El portabebés puede llevar o no reductor, un accesorio muy recomendable que garantiza una correcta postura del bebé en los primeros meses.
Aunque existen portabebés homologados que pueden acoplarse directamente en el carrito de calle, eso no quiere decir que podamos llevar al recién nacido en el coche montado en una cuna, canasto, cesta o similar que utilicemos en casa. Tampoco puede ir con su padre o madre en brazos o sujeto en un fular portabebés.
Cuando el niño o niña supere el rango de altura para los SRI con arneses (100-105 cm) puede comenzar a usar un SRI de tipo elevador o alzador. Este tipo de asientos les hace ganar la altura suficiente para poder usar el cinturón de seguridad del coche de forma segura.
Aunque existen elevadores sin respaldo homologados con la norma i-Size, lo más recomendable es contar con uno que sí tenga respaldo hasta la cabeza (suelen ser ajustables para adaptarse al crecimiento del niño). De esta forma, el menor estará más protegido frente a los impactos, también los laterales.
Según la norma R129, un niño o niña está obligado a utilizar Sistemas de Retención Infantil hasta que alcance la altura de 1,35 metros (aproximadamente a los 12 años de edad). En todo caso, las autoridades y expertos recomiendan que se siga utilizando al menos hasta el 1,50 m.
Como orientación visual, la banda del hombro del cinturón de seguridad no debe tocar el cuello ni quedar bajo la barbilla del niño. En caso contrario, debe seguir usando el elevador.
Una vez que tengas el Sistema de Retención Infantil adecuado para el niño, queda la cuestión de la ubicación más segura para instalarlo, así como la forma más adecuada para llevarlo.
Que un automóvil lleve ISOFIX, no quiere decir que lo lleve en todos los asientos. Lo habitual es que solo esté presente dos asientos traseros, aunque los modelos más familiares de Renault pueden incluirlo en los tres asientos, pensando en las familias numerosas.
Los modelos familiares de Renault también incluyen la solución Fix4Sure, exclusiva de la marca, y que aumenta la seguridad del ISOFIX. Combina un diseño especial del marco del asiento con una posición más baja de las hebillas del cinturón de seguridad para evitar el llamado “efecto submarino” en caso de impacto frontal.
La ubicación del vehículo más seguro para llevar a los niños es en las plazas laterales traseras. En caso de impacto, tanto el SRI como el propio niño están más protegidos por el respaldo de los asientos delanteros. Esto no quiere decir que, en caso de llevar a tres niños, el ubicado en la plaza central corra grave riesgo.
Salvo en casos excepcionales, el niño nunca debe ser ubicado en el asiento del copiloto, pero de hacerlo, deberemos desactivar su airbag correspondiente. Sí se permite que vaya delante cuando empiece a utilizar alzador, pero aún así lo recomendable es que vaya en las plazas traseras.
Es sobradamente conocido que ir a contramarcha (esto es, mirando hacia atrás) es más seguro para el niño, concretamente hasta 5 veces más en caso de colisión. La norma R129 exige la contramarcha hasta los 15 meses de edad, aunque la recomendación general es que vaya en esta posición hasta los 4 años, o al menos hasta cuando la altura del niño lo permita.
Existen SRI homologados que permiten prolongar durante más tiempo la posición a contramarcha del niño. También hay modelos Renault que permiten desplazar unos centímetros los asientos traseros para ganar espacio para las piernas.
Es obvio que, si los Sistemas Avanzados de Asistencia al Conductor ayudan a reducir el riesgo de accidente, también ayudan a proteger a los niños que nos acompañan en el vehículo. Sin embargo, con enfoques como el utilizado por Renault en su programa “Human First”, sirven para tener en cuenta las peculiaridades y necesidades de los más pequeños a la hora de desarrollar los ADAS. Veamos algunos de ellos:
Como vemos, la seguridad de nuestros hijos a bordo depende en gran parte en los Sistemas de Retención Infantil, lo que hace recaer buena parte de la responsabilidad en nosotros y nuestra decisión de utilizar las sillas infantiles adecuadas. Pero también hay un gran apoyo en los sistemas de seguridad ADAS, siendo los vehículos familiares de Renault aquellos que reciben los mejores y más avanzados de los que son capaces los ingenieros del fabricante francés.
sobre el autor
periodista especializado en motor
edad |
altura |
peso |
asiento de seguridad infantil recomendado* |
---|---|---|---|
0-4 años |
40-105 cm |
0-17,5 kg |
Maxi Cosi Pearl 360 + Family Fix 360 Base |
0-19 kg | Joie Spin 360 | ||
3,5-12 años |
100-150 cm |
15-36 kg |
Britax Römer KIDFIX i-SIZE** |